Aunque muchos conozcan esta ciudad por ser la cuna de las famosas despedidas en Gijón, la ciudad tiene tanta historia que merece la pena pararse unos instantes a conocer un poco más sobre ella.
Han sido muchos los pueblos que dejaron aquí su huella. Celtas, romanos, suevos, visigodos o incluso musulmanes. Ninguno de ellos lograron dominar a sus gentes, Astures, lugones o pésicos, pero si legaron para el resto de la historia pequeños trozos de su cultura que aún llega hasta nosotros.
Gijón, la población más grande del Principado tiene más de dos mil quinientos años de historia datada que podría resumirse en los siguientes grandes periodos.
Periodo celta, romano, bárbaro, musulman, medieval y moderno.
De los celtas podemos ver sus vestigios en el museo arqueológico de la ciudad o en la natural de Campa Torres.
De aquella época traemos los seres que componen la mitología astur pre-romana, como el Nuberu, la Xana o la Guaxa.
De la época romana hemos legado la Villa Romana de Veranes, construida en el periodo del Bajo Imperio romano hacia finales del siglo IV d.C. y que podemos visitar y admirar.
Otro lugar de interés relacionado con ese periodo son las Termas romanas de Campo Valdés, también visitables, cuya construcción se calcula que data entre los siglos I y II d.C.
Tras la caída del Imperio Romano le siguieros los llamados pueblos bárbaros, que en la península ibérica fueron representados por los Suevos, Vándalos y Visigodos. De esa época se conserva muy pocos restos arqueológicos.
Tras los visigodos llegó un brevísimo periodo con presencia musulmana. Allá por el año 713 la ciudad de Gijón se convirtió en capital de los dominios transcantábricos bereberes. Pero ya en 722, pocos años después, el célebre Pelayo, un líder local, gana la batalla de Covadonga creando el Reino de Asturias y comenzando la tan conocida Reconquista.
De su paso por Gijón, ha quedado sólo rastros históricos que hoy se reivindican en forma de monumentos como la estatua de Pelayo en la Plaza del Marqués en el casco antiguo de Gijón.
La época Medieval nos deja iglesias como la de San Andrés de Ceares, del siglo XII.
Pero es a partir de 1270 cuando Alfonso X el Sabio otorga la calidad de Puebla a Gijón y la ciudad empieza a desarrollarse de forma exponencial.
El ilustrado español Jovellanos, natural de Gijón es quien fue el verdadero impulsor de la ciudad ya que diseñó el proceso de industrialización con el puerto de El Musel, los Astilleros y otras instalaciones para convertir a la ciudad en el motor industrial de Asturias.
Por esta época, en la ciudad se construyeron edificios como el Palacio del Conde de Revillagigedo que hoy es el Centro Internacional de Arte Cajastur, sin duda el más importante de la ciudad.
Un breve repaso por una historia de siglos en la que la ciudad de Gijón ha sido el centro de actividad de toda una zona, estratégica y muy valorada por sus muchos recursos naturales.
Y esos mismos recursos son los que hoy, han convertido a Gijón, por méritos propios, en el referente dentro del mundo de las Despedidas de Soltero y Soltera en Asturias. Una ciudad con la vida noctura más activa de toda la región y con los servicios más variados.